4 pasos sencillos para conseguir el sueño profundo:
1-Túmbate boca abajo y gira tu cabeza de modo que tu mejilla derecha se apoye contra la almohada. Abre tu fosa nasal izquierda para traer energía refrescante, tranquilizante y calmante.
2-Respira de manera consciente, larga y profunda por tu nariz. Concéntrate en hacer tu respiración tan larga como sea posible. Medita en Sat con la inhalación, Nam con la exhalación.
3-Después de algunas respiraciones bloquea con la mano la fosa nasal derecha y respira solamente por la fosa nasal izquierda. Sigue respirando larga y profundamente.
4-Cuando sientas que estás alcanzando una etapa preliminar al sueño, lo que normalmente ocurre después de 10 respiraciones, gira sobre tu costado y continua con la respiración hasta dormirte. Es mejor dormir sobre el costado derecho ya que se pone menos presión sobre el corazón, mejora la digestión y se mantiene la fosa izquierda abierta.
¡Buenos sueños y mejores despertares!